Capítulo 7:
Almendra y Julián se
miran impresionados y no se dejan de mirarse. Mónica se da cuenta de eso y los
separa.
Mónica (abrazando el
brazo de su esposo): ¡Mi amor, viniste!
Julián (con la mirada
extrañada): Sí, vine y estaré contigo… por siempre.
Mónica sujeta del
brazo de su esposo y se junta hacía él. Almendra se fija de ello y siente celos
de la misma Mónica.
Baldomero: No puede
haber un momento de libertad en esta casa.
Julián (alterado): ¡Mira,
mejor cállate y no digas nada! Agradece que eres el hermano de mi esposa,
porque si no te hubiera echado yo mismo.
Baldomero: Sí, ¿cómo
no?
Mónica (seria): ¡Basta,
hermano!
Rubén: Bueno, yo paso
a retirarme. Hasta pronto Julián y saludos Mónica.
Mónica: Adelante.
Lorenza (se ofrece a
acompañar a Rubén): Lo acompaño a la puerta.
Rubén: Gracias… (Se
va.)
Julián se queda
mirando a Baldomero por la travesura que hizo.
INT. / SALA DE ESTAR
/ MANSIÓN URIARTE / NOCHE
Emilia (contenta): Hay
que admitir que pasar contigo con tus amistades es divertido.
Rogelio (esboza una
sonrisa): Es cierto. (Cierran la puerta.) ¿Sabes? Nunca me he sentido tan
feliz, quizás, porque tú y yo hemos sido el uno para el otro.
Emilia: Eso es
verdad, recuerdo cuando te conocí por primera vez.
(Flashback.
*Emilia y Raúl eran
jóvenes en su tiempo, vemos que la primera era secretaria y el segundo
trabajaba allí, ayudando a su padre. Ambos se encuentran en el corredor. Emilia
va pasando con unos documentos y por accidente se les cae.
Emilia (temerosa):
¡Ay! Ay no, el patrón me va a despedir por incumplida.
Rogelio: ¿Te ayudo?
Ambos se quedan
mirándose y siente el amor a primera vista.
Emilia (sonroja):
Muchas… gracias.
Rogelio (sonroja): Se
ve que no eres de aquí, ¿eres nueva?.
Emilia: Sí, apenas me
dieron el trabajo.
Rogelio (seductor):
Pues, para ser nueva, eres muy bonita.
Emilia se queda perfil bajo y sonroja aun más.
*Tienen otro recuerdo
y se trata de cuando ellos se besan intensamente en una cafetería.
*Ambos se declaran su
amor en la noche, se besan, luego vemos que tienen una intimidad juntos y ambos
se apasionan entre sí mismos.
*Emilia y Rogelio
recuerdan su último encuentro cuando el segundo le confiesa en el parque…
Rogelio: Tengo que
irme al extranjero, pero quiero que me recuerdes siempre… Toma (le da una
medallita) quiero que lo conserves como símbolo de nuestro amor.
Emilia: Gracias
Rogelio, siempre te amaré y ¡te amo! (Ambos se besan profundamente.)
Fin del Flashback.)
Emilia: Y desde ahí
comenzó mi calvario con tu familia.
Rogelio: Nunca me
perdonaré de no haberles dicho nada… Aunque recuerdas la intimidad que tuvimos,
estaba muy seguro que íbamos a tener un hijo…
Emilia se impacta al
escuchar ese comentario.
Emilia: Yo creo que
es mejor que nos vayamos a dormir, el paseo estuvo intenso.
Rogelio la mira extrañado.
INT. / LIVING / MANSIÖN SAN ROMÁN·/ NOCHE
Baldomero: ¡Por
favor! Deja que ellas se queden aquí por un día, no se enterara Raúl.
Raúl (serio): Creo
que no te cansas de hacer lo mismo de siempre.
Julián: Papá, por
favor.
Raúl (furioso): Pero
es que nada. Este vagabundo del demonio que se vaya de mi casa. ¡Ahora! Junto
con ese par de mujerzuelas baratas que seguro hasta les cobra a los ancianos y
rompe hogares.
Rubí (alterada): ¡Óigame, no le permito que nos ofenda!
Almendra: Nosotras no
somos de esa clase de fichitas como nos dice.
Raúl: Par de cínicas,
eso es lo que son, mujerzuelas, corrientes y unas bastardas. Por eso (se acerca
a ellas) Quiero que se vayan de mi casa (le jala del brazo a Almendra), ¡ahora!
Julián (alterado):
¡Papá basta!
Almendra (lastimada):
¡Suélteme viejo asqueroso! (Siente temor de su pasado.) ¡Basta! (Le da una
tremenda bofetada.)
Raúl se queda pasmado
ante la golpiza que le dio, mientras que Almendra tiene sentimientos
encontrados y derrama lágrimas discretas, se va junto con Rubí de la casa,
Baldomero las acompaña.
Julián (preocupado):
Papá, estás bien…
Raúl (alterado): ¡NO
ME TOQUES!
Mónica se toca el
pecho por un mal cardíaco. Julián se da cuenta y decide llevarla al cuarto,
dejando solo a Raúl. Leticia quien aparece recién, lo mira preocupada y se va.
EXT. / COCHE DE
BALDOMERO / CIUDAD DE MÉXICO / NOCHE
Rubí: ¿Saben? Nunca
debimos ir a esa casa.
Almendra: Por el
santo niño de Atocha, en verdad fue horrible.
Baldomero (alterado):
¡Quieren callarse las dos! Por su culpa ya no podré regresar a esa casa.
Las dos se quedan
pensativas, mientras que Baldomero sigue conduciendo.
INT. / HABITACIÓN / HOTEL
DE LA CIUDAD / NOCHE
Almendra, Baldomero y
Rubí entran al cuarto de un hotel.
Almendra: Gracias por
pagar el cuarto para nosotras.
Baldomero: No tenía
de otra, ahora tengo que pensar en ¿cómo regresar a la casa?
Rubí: Es mejor que
descansemos, seguro mañana se le olvidará.
Baldomero se queda
pensativo, mientras que las dos se recuestan en la misma cama.
INT. / OFICINA DE
RAÚL / CONSTRUCTORA SAN ROMÁN / MAÑANA
Julián: ¡Buenos días
Mónica!
Mónica: ¡Buenos días!
Julián: Te tengo que decirte
algo.
Mónica (extrañada):
¿Qué sucede? ¿Se trata sobre mí?
Julián: Se trata… Se
trata sobre tus análisis que padeces.
Mónica se queda extrañada
mirando a Julián.
Mónica: Y, bueno
entonces que fue… ¿tengo algo?
Julián no le queda
que responderle a su confundida esposa.
Julián: Eso se está
encargando Rubén, pero descuida, te cuento esto porque confío en que lo vas a
tomar muy bien la noticia.
Mónica se queda
extrañada, mientras que Julián se le nota preocupación.
En la sala de estar…
Suena el teléfono y Leticia pasa a contestar.
Leticia: ¿Bueno?
Raúl: (hablando por
teléfono) Te agradezco por el dato. (Pausa) Eres muy eficiente. (Pausa) Ándale,
gracias.(cuelga)
Raúl ve la nota que escribió.
Raúl: Así que es el bar “La Tongelele”, donde trabaja la Almendrita esa. Pues bien…veremos que tal hace su show delante de mí, jejeje.
Raúl ve la nota que escribió.
Raúl: Así que es el bar “La Tongelele”, donde trabaja la Almendrita esa. Pues bien…veremos que tal hace su show delante de mí, jejeje.
INT. / HABITACION /
HOTEL DE LA CIUDAD / MAÑANA
Almendra y Rubí están
descansando, Baldomero está despierto, en eso tocan la puerta. Se trata de
Carmen…
Baldomero: Ah, ¿qué paso?
Leticia: Vine porque me preocupas después de todo.
Baldomero: ¿Cómo
supiste que estoy aquí?
Leticia: Créame que si no fueras tan confidente conmigo, no te buscaría, aparte de mi preocupación, paso a decirte que te llamaron por teléfono, pues tu celular, dicen que está apagado.
Baldomero (extrañado): ¿y sabes quién me hablaba?
Leticia: Dijo que era amigo suyo, que quiere hablar urgente con usted.
Baldomero: Bueno está bien, ahora que sabes que estoy bien, ya te puedes irte.
Leticia: Créame que si no fueras tan confidente conmigo, no te buscaría, aparte de mi preocupación, paso a decirte que te llamaron por teléfono, pues tu celular, dicen que está apagado.
Baldomero (extrañado): ¿y sabes quién me hablaba?
Leticia: Dijo que era amigo suyo, que quiere hablar urgente con usted.
Baldomero: Bueno está bien, ahora que sabes que estoy bien, ya te puedes irte.
Leticia se da cuenta
de la presencia de las dos mujercitas.
Leticia: Sí, paso a
retirarme, no sé qué opine su hermana, ¿si regresa o no?
Baldomero se queda
mirándola.
INT. / OFICINA /
CONSULTORIO / MAÑANA
Rubén: ¡Hola, Julián! Aquí están los resultados de los últimos análisis que le practique.
Julián (recibe los resultados): Gracias.
Julián se sienta y mira los resultados.
Julián (se queda mirando a Rubén): Salió positivo.
Julián se espanta.
Rubén: En efecto. Mónica tiene leucemia.
Julián se siente derrotado.
Rubén: Lo siento mucho Julián, pero tendrás que decirle toda la verdad. Y que lo más pronto posible encontremos el tratamiento adecuado.
Vemos a Julián en
pausado y deprimido.
Julián (triste, se lleva las manos a la cabeza): No sé cómo se lo voy a decir.
Rubén: Debes hacerlo, entre más tiempo pase, peor para ti y para ella.
Julián derrama
lágrimas discretas.
INT. / HABITACION / HOTEL DE LA CIUDAD / MAÑANA
Rubí: ¡Buenos días
muñeco!
Baldomero: Mejor
váyanse de aquí…
Almendra: ¿Cómo
dices?
Baldomero: ¡Fuera!
Rubí: Ay, pensé que
nos íbamos a quedar un poco más.
Baldomero: Pero ya
no, además solo una noche o pagan la renta. Así que… ¡aguacando el ala!
Almendra y Rubí se
van con desagrado hacia él. El celular de éste suena, y él contesta.
Baldomero: ¿Bueno?
Del otro lado de la línea está un personaje siniestro.
Desconocido: ¡Buenos días, Balde! ¿Me recuerdas?
Baldomero se acomoda, y se sorprende, reconoce la voz.
Baldomero: ¿Alacrán? Sé que eres tú.
Alacrán: Vaya, ¿tan pronto te diste cuenta? Que memoria la tuya.
Baldomero: ¿cómo conseguiste mi número de teléfono?
Alacrán: Para mí no hay imposibles, también tengo la de tu casa. Mis contactos son muy buenos hasta en eso.
Baldomero: ¿qué quieres?
Alacrán: ¿Cómo que quiero? ¿Es que acaso se te olvido que me debes dinero?
Baldomero (pone cara de preocupación): No, no se me ha olvidado.
Alacrán: Ya tienes un buen que no das noticias sobre mi dinero. Es más, ni la cara me has dado en estos últimos días.
Baldomero: Mira, alacrán, yo…
Alacrán (alterado): ¡¡¡Tu nada!!! Ya estoy cansado de que siempre haya una excusa barata para no pagarme. Recuerda que conmigo son deudas de honor, se si no se liquidan en su debido tiempo, entonces no hay otra solución. ¡Te mueres!
Baldomero se pone en cara de espantado.
Del otro lado de la línea está un personaje siniestro.
Desconocido: ¡Buenos días, Balde! ¿Me recuerdas?
Baldomero se acomoda, y se sorprende, reconoce la voz.
Baldomero: ¿Alacrán? Sé que eres tú.
Alacrán: Vaya, ¿tan pronto te diste cuenta? Que memoria la tuya.
Baldomero: ¿cómo conseguiste mi número de teléfono?
Alacrán: Para mí no hay imposibles, también tengo la de tu casa. Mis contactos son muy buenos hasta en eso.
Baldomero: ¿qué quieres?
Alacrán: ¿Cómo que quiero? ¿Es que acaso se te olvido que me debes dinero?
Baldomero (pone cara de preocupación): No, no se me ha olvidado.
Alacrán: Ya tienes un buen que no das noticias sobre mi dinero. Es más, ni la cara me has dado en estos últimos días.
Baldomero: Mira, alacrán, yo…
Alacrán (alterado): ¡¡¡Tu nada!!! Ya estoy cansado de que siempre haya una excusa barata para no pagarme. Recuerda que conmigo son deudas de honor, se si no se liquidan en su debido tiempo, entonces no hay otra solución. ¡Te mueres!
Baldomero se pone en cara de espantado.
Mientras tanto,
Almendra y Rubí van llegando a la casa de la segunda, continúan hablando, molestas,
y en segundos la primera cierra la puerta.
Almendra: ¡Qué
especial resultó ser Balde!
Rubí: Ay sí, resultó
ser un completo patán, nos botó de su covacha. Hubiera sido diferente que si el
papacito de Julián nos hiciera ese favorcito…
Almendra se queda
pensativa…
INT. / SALA DE ESTAR
/ CASA DE ÚRSULA / TARDE
Úrsula: Pues ya tengo
todo lo que planeamos, hijita.
Rebecca: ¿Qué cosa?
Úrsula: No te hagas,
lo que vas a hacer…
Rebecca sonríe con
malicia.
Rebecca: Huum, ser la
hijita de los Uriarte.
Úrsula: Exacto.
Rebecca: Pero ¿cómo lo van a creer? Necesito pruebas para eso.
Úrsula: Conmigo, lo
que importa es que crean la versión que tengo yo.
Rebecca: Puede ser,
¿a ver qué pasa? Nada perdemos con intentarlo.
Ambas sonríen con
malicia.
INT. / COMEDOR / CASA
DE RUBÍ / TARDE
Almendra se sirve una
taza de café. Sus pensamientos siguen fijos en Julián San Román y toma un sorbo
de la taza.
Almendra: (Pensamientos) Desde anoche no dejo de pensar en él. ¿Qué me pasa? (Con voz temblorosa.) ¿Por qué siento la necesidad de verlo? De cómo si volver a verlo me diera una pista de… ¿quién es?
Almendra: (Pensamientos) Desde anoche no dejo de pensar en él. ¿Qué me pasa? (Con voz temblorosa.) ¿Por qué siento la necesidad de verlo? De cómo si volver a verlo me diera una pista de… ¿quién es?
Deja pensativa por un
largo rato a Almendra…
INT. / CAMERINO DE
ALMENDRA Y RUBÍ / TARDE
Jaina se queda viendo
a Zoila que trae unos vestidos muy hermosos, de color rojo y otro verde, para
ellas en la noche de la presentación.
Jaina: Hey, ¿por qué la
Almendrita esa va a usar ese vestido?
Zoila: Porque es la estrella y todos la adoran, muchacha.
Jaina: No me parece justo, Zoila. Yo también soy estrella.
Zoila: Lo siento, además el vestido que te traje, también es bonito. No estemos peleando por tonterías.
Jaina: Pero esto no puede ser. Yo vengo temprano, ensayo, me esfuerzo, incluso llamo la atención de muchos, no tengo las mismas consideraciones que ella. En cambio, Almendra, que cuando le da la gana viene, si le toleras cosas, y hasta la premias y todo.
Zoila: ¡Por favor Jaina! Compórtate. Tengo otras cosas más que hacer, que pelear contigo. Ya te dije que la envidia no te llevara a nada bueno.
Zoila se retira, dejando a Jaina enfrente del vestido rojo que usara Almendra. (Cierra la puerta.)
Jaina: ¡La odio! La odio, maldita seas, Almendrita de chocolate…pero veremos en ¿qué cuero sale más correas?
Jaina sonríe de malicia ante el vestido rojizo.
En la calle, en un auto de lujo, viene Emilia con Rogelio.
Emilia: Que agrado pasar un tiempo contigo.
Rogelio: Muchas gracias. Deberíamos en pensar en un viaje.
Emilia: No suena mal.
En otra esquina esta Almendra llevando bolsas del súper.
Almendra: ¡¡Me lleva!! El bus no pasa. Tendré que cruzar la otra calle y agarrar el otro.
Almendra sostiene los bolsos y cruza.
En el auto.
Rogelio: Date vuelta en la esquina, Ramiro, quiero pasar al juzgado.
Ramiro (conduciendo): Si señor.
Emilia: ¿Tienes algo pendiente?
Rogelio: Sí, quiero recoger unos documentos y analizarlos en casa.
El auto sigue su marcha hasta dar la vuelta, pero en eso cruza Almendra, lo cual no ve de inmediato Ramiro quien al percatarse, frena (Almendra (grita): ¡AAAAAAAAAAAh!)… los bolsos salen volando. Rogelio y Emilia quedan espantados, al igual que el chofer.
INT. / SALA DE ESTAR / MANSIÓN SAN ROMÁN / TARDE
Zoila: Porque es la estrella y todos la adoran, muchacha.
Jaina: No me parece justo, Zoila. Yo también soy estrella.
Zoila: Lo siento, además el vestido que te traje, también es bonito. No estemos peleando por tonterías.
Jaina: Pero esto no puede ser. Yo vengo temprano, ensayo, me esfuerzo, incluso llamo la atención de muchos, no tengo las mismas consideraciones que ella. En cambio, Almendra, que cuando le da la gana viene, si le toleras cosas, y hasta la premias y todo.
Zoila: ¡Por favor Jaina! Compórtate. Tengo otras cosas más que hacer, que pelear contigo. Ya te dije que la envidia no te llevara a nada bueno.
Zoila se retira, dejando a Jaina enfrente del vestido rojo que usara Almendra. (Cierra la puerta.)
Jaina: ¡La odio! La odio, maldita seas, Almendrita de chocolate…pero veremos en ¿qué cuero sale más correas?
Jaina sonríe de malicia ante el vestido rojizo.
En la calle, en un auto de lujo, viene Emilia con Rogelio.
Emilia: Que agrado pasar un tiempo contigo.
Rogelio: Muchas gracias. Deberíamos en pensar en un viaje.
Emilia: No suena mal.
En otra esquina esta Almendra llevando bolsas del súper.
Almendra: ¡¡Me lleva!! El bus no pasa. Tendré que cruzar la otra calle y agarrar el otro.
Almendra sostiene los bolsos y cruza.
En el auto.
Rogelio: Date vuelta en la esquina, Ramiro, quiero pasar al juzgado.
Ramiro (conduciendo): Si señor.
Emilia: ¿Tienes algo pendiente?
Rogelio: Sí, quiero recoger unos documentos y analizarlos en casa.
El auto sigue su marcha hasta dar la vuelta, pero en eso cruza Almendra, lo cual no ve de inmediato Ramiro quien al percatarse, frena (Almendra (grita): ¡AAAAAAAAAAAh!)… los bolsos salen volando. Rogelio y Emilia quedan espantados, al igual que el chofer.
INT. / SALA DE ESTAR / MANSIÓN SAN ROMÁN / TARDE
Mónica: Es muy temprano para que estés aquí, Julián.
Julián: Si lo sé, pero es necesario (se sientan en los sofás)… (Se pone sofocado) que sepas la verdad.
Mónica (extrañada): ¿Se trata de los resultados, verdad?
Julián: Sí.
Mónica (suspira): ¿Y bien? (nerviosa) ¿Qué dice?
Julián aprieta bien el sobre del resultado medico.
Julián: Mi amor… tienes que ser fuerte.
Mónica (se pone tensa): Dime lo que sea, ¡pero ya!
Julián (agitado): Te… te detectaron… Te detectaron leucemia.
Mónica se asombra ante está noticia y le salen lágrimas discretas.
EXT. / CALLE / CIUDAD
DE MÉ XICO / TARDE
En la calle, apunto
de anochecer, Ramiro sale del auto y auxilia a la joven, de inmediato, Ricardo
también sale.
Ramiro: ¡señorita!, ¡¿se encuentra bien?!
Almendra (hace quejidos): ¿qué paso?
Rogelio quien sale del auto va a verla.
Ramiro: ¡señorita!, ¡¿se encuentra bien?!
Almendra (hace quejidos): ¿qué paso?
Rogelio quien sale del auto va a verla.
Rogelio: ¿Se
encuentra bien la muchacha?
Ramiro: Creo que sí, señor.
Rogelio: ¿No se fracturo nada, o algo así?
Ramiro: Creo que sí, señor.
Rogelio: ¿No se fracturo nada, o algo así?
Ramiro: Creo que no,
no paso a mayores.
Almendra: No, creo que no.
Almendra con la ayuda de Ramiro se pone de pie. Mientras que Emilia se va a punto de salir del coche.
Almendra: No, creo que no.
Almendra con la ayuda de Ramiro se pone de pie. Mientras que Emilia se va a punto de salir del coche.
Mónica (dos lágrimas
se ven caer en el rostro): Esto no puede ser cierto…
Julián (sollozo): Mi amor…no quiero que esto te afecte ahora… Debes ser fuerte.
Mónica se acerca a su esposo para abrazarlo.
Julián: Rubén dice que hay que comenzar un tratamiento lo antes posible.
Mónica: Lo haré, pero si pierdo la vida.
Julián: No lo veas así, solo confía en mí… ¿de acuerdo?
Mónica (dudando con los ojos rojos): No lo sé… (Poniendo sus manos a su rostro.)
Julián se queda mudo, y mejor la abraza.
Julián (sollozo): Mi amor…no quiero que esto te afecte ahora… Debes ser fuerte.
Mónica se acerca a su esposo para abrazarlo.
Julián: Rubén dice que hay que comenzar un tratamiento lo antes posible.
Mónica: Lo haré, pero si pierdo la vida.
Julián: No lo veas así, solo confía en mí… ¿de acuerdo?
Mónica (dudando con los ojos rojos): No lo sé… (Poniendo sus manos a su rostro.)
Julián se queda mudo, y mejor la abraza.
EXT. / CALLE / CIUDAD
DE MÉXICO / TARDE
Los coches se van
pasando, mientras que uno de ellos toca el claxon. Emilia sale del auto.
Emilia (preocupada): Hija, ¿estás bien?
Almendra se acomoda el vestido, y se da cuenta que es la misma mujer que se topo el otro día.
Almendra (suena muy ruda): Sí, disculpe la torpeza. Ahora me voy de aquí.
Rogelio: Al contrario, discúlpanos, no era nuestra intención, fue un accidente.
Ramiro recoge las bolsas de mandado de Almendra.
Emilia: ¿Quieres que te llevemos con un medico?
Almendra: No, gracias, no es necesario.
Rogelio: Te pedimos una disculpa.
Ramiro: Yo más, porque conducía y me pase sin fijarme.
Almendra (se le nota molestia): No se preocupen, como dicen, fue un accidente.
Emilia (preocupada): Hija, ¿estás bien?
Almendra se acomoda el vestido, y se da cuenta que es la misma mujer que se topo el otro día.
Almendra (suena muy ruda): Sí, disculpe la torpeza. Ahora me voy de aquí.
Rogelio: Al contrario, discúlpanos, no era nuestra intención, fue un accidente.
Ramiro recoge las bolsas de mandado de Almendra.
Emilia: ¿Quieres que te llevemos con un medico?
Almendra: No, gracias, no es necesario.
Rogelio: Te pedimos una disculpa.
Ramiro: Yo más, porque conducía y me pase sin fijarme.
Almendra (se le nota molestia): No se preocupen, como dicen, fue un accidente.
Almendra recoge las
bolsas y se va.
INT. / SALA DE ESTAR
/ MANSIÓN SAN ROMÁN / NOCHE
Leticia: ¿Se lo dijo?
Julián: ¿Sobre qué?
Leticia: Que tiene cáncer.
Julián (se sorprende más): ¿Tú lo sabías?
Leticia: Sí. Desde el hospital, el doctor me lo confirmo todo.
Julián: ¿Y por qué no le dijiste nada?...
Leticia: ¿Qué se va a morir? …
Julián: ¿Sobre qué?
Leticia: Que tiene cáncer.
Julián (se sorprende más): ¿Tú lo sabías?
Leticia: Sí. Desde el hospital, el doctor me lo confirmo todo.
Julián: ¿Y por qué no le dijiste nada?...
Leticia: ¿Qué se va a morir? …
* Mónica se encuentra acostada en la cama, llorando.
Leticia: Lo siento
mucho Julián, pero eso debiste decírselo tú, no yo.
Fin de la
Intercalación.)
Julián: ¡Y no sabes, lo duro que fue contarle todo! Decirle el día de hoy, que tiene cáncer y que se tiene que tratar.
Leticia (le salen lágrimas discretas): ¿Entonces? ¿La niña Mónica si va a morir?
Julián: Eso está en veremos, porque haré lo posible para que eso no suceda. Mónica tiene que vivir hasta su vejez. Y lo voy a lograr… ¡Lo prometo!
Leticia mira con
sentimientos de angustia a Julián.
CONTINUARÁ…
No hay comentarios:
Publicar un comentario