Capítulo 6: “Reencuentro”

Capítulo 6:

“Reencuentro”

La pesadilla se ve a Almendra y Julián juntos en un ambiente macabro, donde él resulta ser el violador de la protagonista.

Almendra: ¡NOOOOOOOOOOOOOOOO…!

Termina la pesadilla.

Julián: ¡NO!

Mónica se impresiona y reacciona al ver a su marido.

Mónica: Julián, ¿estás bien?

Julián (tembloroso): S-see…

Mónica: Mi amor, no te siento bien, es mejor que hablemos… (Julián le brota lágrimas.) ¿Qué sucede?

Julián (nervioso): Nada… Solo fue una pesadilla no más.

Mónica: ¿Una pesadilla? Mi amor no es para tanto, digo, eres un hombre fuerte.

Julián (dándole la razón): Sí verdad, es solo eso… una pesadilla.

Mónica (se le acerca de a pegadito): ¿Sabes? Te amo a pesar de todo, yo siento que soy la mujer más afortunada del planeta por estar contigo. (Julián esboza tristeza.) Pero sabes qué, no me importa lo que me pasé, a pesar de todo. ¡Te amo! Y eso jamás lo voy a olvidar de ti.

Julián (Pensamiento): Si supieras todo el lado oscuro que poseo. (Pausa)

Mónica: Mi amor, ¿en qué piensas?

Julián (esboza una sonrisa): Todo lo que me dijiste… Es muy bonito y yo también… Soy afortunado de tenerte en mis brazos.

Mónica (dudosa): Mi amor…

Julián le da un inmenso beso romántico y se abrazan muy fuertes ya en descanso en su cama.

EXT. / VECINDAD / CIUDAD DE MÉXICO / MAÑANA

Ha pasado meses después… Rebecca va viniendo a la vecindad y se adentra a la casa de su tía Carmen. Tocan la puerta y se trata de ella, le abre la puerta.

Úrsula: ¡¿Tú?!

Rebecca (esboza una sonrisa): Sí ¡Hola tía!

La tía se Úrsula se sorprende y no de manera alegre como nos hace ver.

INT.  / SALA DE ESTAR / MANSIÓN URIARTE·/ MAÑANA

Emilia está sentada en un sofá mientras que Rogelio va viniendo hacia ella…

 

Rogelio: ¡Buenos días amor! (Le besa una mejilla.)

Emilia: ¡Hola cariño! (Le besa una mejilla.) Clotilde me dijo que ibas hablar conmigo.

Rogelio: Así es, se trata de… De nosotros.

Ambos se quedan mirándose.

INT. / SALA DE ESTAR / CASA DE ÚRSULA / MAÑANA

Úrsula la recibe con un pésimo humor.

Úrsula: Ay, no sé cómo le veas tú, pero en mi casa no te quedas.

Rebecca: Quizás, yo pago la renta de esta casa.

Úrsula: ¿Y cómo? Si desperdiciaste años en Miami, ni trabajo conseguiste, ya ves la situación en que estamos ahora en México.

Rebecca: Algo se me ocurrirá, ya verás.

Úrsula la mira con mucha decepción.

INT. / CUARTO / CASA DE RUBÍ / MAÑANA

Almendra está dormida, mientras que Rubí la despierta…

Rubí: ¡Despierta floja! Es hora de desayunar, pues…

Almendra se levanta muy quejumbrosa…

Rubí: Ay, tranqui amiga, no te veo muy bien.

Almendra: No he podido dormir bien. (Rubí nota la almohada mojada.) Es por eso que no puedo levantarme muy bien.

Rubí (preocupada): Debe ser de nuevo esa pesadilla ¿no es así?

Almendra: Es eso, porque no he podido dormir bien y soñar con el maldito que me violo.

Rubí: Pero tranquila…

Almendra: ¡Juro que cuando encuentre al maldito que me hizo daño, lo va a pagar muy caro!

Rubí se preocupa mucho de Almendra.

INT.  / SALA DE ESTAR / MANSIÖN URIARTE·/ MAÑANA

Emilia y Rogelio están conversando…

Emilia: ¿No deberías irte al trabajo?

Rogelio: Claro, pero voy llegando tarde, ahora mi prioridad es por ti.

Emilia: ¿Qué sucede Rogelio?

Rogelio: Se trata de nosotros. Hace mucho no tenemos un hijo y te siento muy triste, que vas al orfanato para ver a esos niños.

Emilia: Ya te dije Rogelio, que no me he sentido muy bien, después de esos años de angustia que sufrí por culpa de tus padres.

Rogelio: Y me siento culpable, la verdad debí quedarme en México para ver de nosotros. Jamás pensé que ellos fueran de esa manera.

Emilia: Para que veas que todo puede pasar.

Rogelio: Pero ese no es el asunto, sino de nuestro presente.

Emilia: No me he sentido con tener un hijo.

Rogelio: Pero somos ya adultos, de hecho, podemos adoptar uno. (Emilia lo mira preocupada.) Es eso, quieres adoptar un hijo y que forme parte de nuestra familia.

Emilia: Es que… ¡Tú no me entiendes!

Emilia se va dejando a Rogelio muy extrañado. Ella se va a su cuarto a llorar intensamente. Clotilde se acerca a Rogelio.

Clotilde: Señor Uriarte, ¿necesita algo?

Rogelio: No, no necesito nada. ¡Buenos días!

Rogelio se va de la casa, dejando a una Clotilde muy segura de sí misma y de expresión maliciosa.

INT. / SALA DE ESTAR / CASA DE ÚRSULA / MAÑANA

Úrsula toma un periódico y encuentra algo de su interés que la deja sorprendida…

Rebecca: ¿Sabes? ¿Y si me pongo a buscar marido para ser rica?

Úrsula se queda pensativa.

Rebecca: ¿Qué te sucede tía?

Úrsula (la mira muy segura): Hija, ¿cuántos años tienes?

Rebecca: ¿Por qué la pregunta? Es claro que yo tengo 23 años.

Úrsula (sonríe maliciosamente): Pues ya no, ahora tienes 20 años.

Rebecca (extrañada): ¿Y eso? ¿Por qué tengo 20 años?

Úrsula: Es que… ¡Ven! Te lo voy a contar a detalles. (Enseñándole el artículo que salen Emilia y Rogelio.) Te presento… A tus nuevos papás.

Rebecca se impresiona y después sonríe maliciosamente.

INT. / CUARTO / CASA DE RUBÍ / MAÑANA

Rubí y Almendra alistan para salir de nuevo a la calle.

Rubí: Bueno ¿qué? Ahora ¿qué le vamos a hacer en la siguiente fiesta?

Almendra: Te refieres a esta noche ¿no? Pues bueno podemos… Aceptar la dichosa invitación del Baldomero.

Rubí: Ahora que lo pienso muy bien, hace meses que nos dijo que íbamos a ir al canton del viejo malcriado.

Almendra: Sí pues, pero ni mais con él.

Rubí: Seguramente lo tiene bien atado de correa.

Almendra: Eso puede ser, pero me preocupa lo que le pase a Baldo. Digo, es mala onda y todo, pero no se vale que nos siga fastidiando y que venga al bar todo tembloroso.

Rubí: Wow, pero ¿quién te entiende? Hace poco no querías a Balde y ahora sí, que sucesos de la vida mi amiga.

Almendra: Es que a pesar de todo, él no tiene la culpa de ser así, quizás… Algo malo tuvo que pasarle.

Almendra se queda pensativa.

 INT. / CORREDOR / MANSIÓN SAN ROMÁN / MAÑANA

Mónica se levanta para dirigirse a la sala. Mientras que se encuentra con Leticia y ambas sonríen…

Leticia: ¡Mónica! Te veo muy mejorada.

Mónica: Gracias Leticia, tengo que verme muy bien de salud para mi esposo. ¿Y tú qué haces?

Leticia: Eso lo creo, bien, ahora ando checando los cuartos. Estoy disponible para lo que me pidas.

Mónica: Suena muy bien.

Ambas sonríen.

Int. / Living / Mansión URIARTE / TARDE

Clotilde, la ama de llaves de la familia va a hacer un llamado a Emilia…

Clotilde: Señora Emilia.

Emilia baja las escaleras.

Emilia: ¿Qué sucede Clotilde?

Clotilde: Acaba de llegar el señor Rogelio y… (voltea para asegurarse que no la vea comentar) trae un obsequio.

En eso aparece y abre la puerta Rogelio con un obsequio para su amada esposa, Emilia siente destellos de felicidad y va a abrazar a su marido.

Emilia (afectuosa): ¡¡Rogelio!!

Rogelio: Emilia, ¡¡mi amor!!

Emilia: Pensé que otra vez llegarías de noche.

Ambos se van a unos sofás y se sientan.

Rogelio: Pues sí, sobre eso, voy a regresar a la Suprema Corte de Justicia, están en receso por ahora, pero que tengo ocupaciones… los tengo.

Emilia: Me alegra mucho y excelente que estés de regreso.

Rogelio: Sí lo sé, ¿y tu como has estado?

Emilia: Yo no tengo nada que decir, estoy bien, y me la pase extrañándote.

Rogelio: Que bueno. ¿Qué te parece si salimos a comer esta tarde?, así nos despejamos de la rutina diaria.

Emilia: Me parece buena idea.

INT. / SALA / CASA DE ÚRSULA / TARDE

Rebecca y Úrsula tienen dos vasos de aguas para su disponibilidad…

Rebecca: ¡¡¡Pero claro!!! ¿Por qué no hacerme pasar por la “bastarda” esa de esa familia rica?

Úrsula: Mmm, bueno yo la verdad hace mucho que no me veo con Emilia, incluso ni me importaba mucho su vida, pero con esta noticia (esboza una sonrisa de satisfacción), va que vuela unas merecidas mesadas, eso porque cuide de ella hace mucho tiempo.

Rebecca: Pero dime la verdad, ¿se conocen de verás o es un teatro tuyo?

Úrsula la mira con decepción…

Úrsula: ¿Yo cuando he mentido?

Rebecca: Bueno, yo decía…

Úrsula: Pero que vamos a disfrutar de la vida con mi “amiga”, lo vamos a hacer.

Ambas sonríen con hipocresía.

INT. / OFICINA DE RAÚL / CONSTRUCTORA SAN ROMÁN / TARDE

Julián entra a la oficina de su padre, pues la puerta estaba abierta y Raúl le llama mucho la atención…

Raúl (serio): ¡Vaya, hasta que te dignas en trabajar!

Julián: Siempre lo he hecho, en mi consultorio.

Raúl: Eso no es trabajo, eso solo una pérdida de tiempo, atender a unos dementes que no tienen vida ni nada qué hacer. De repente suena el teléfono de Julián y contesta…

Julián (rueda los ojos): Lo que digas papá…

Julián pasa a retirarse del lugar. Don Raúl lo mira con decepción y después esboza una sonrisa.

Julián: ¿Bueno?…

Rubén contesta en el hospital, quien es médico allí…

Rubén: Hola Julián, solo quería llamarte para consultarte algo… Se trata sobre Mónica.

Julián: ¿Qué sucede?

Rubén: Es que la verdad, debo decírtelo, pero es mejor vernos en persona.

Julián: Y… ¿dónde nos encontramos?

Rubén: En el café del club…

Julián: Mira, ahorita estoy con mi papá en la constructora.

Rubén: ¡Ah, perfecto! Entonces nos vemos en el sitio de alado, a las 7pm.

Julián: De acuerdo, (empieza a preocuparse) pero ¿es grave el asunto?

Rubén: Eso tienes que enterarte en nuestro encuentro. Nos vemos.

Julián: Nos vemos.

Julián termina la llamada con Rubén, pero se queda preocupado con la situación.

INT. / BAR “La Tongelele” / NOCHE

Pasa la noche en la ciudad de México, vemos correr a los autos en la carretera a velocidad x2. Mientras que en el bar “La Tongelele” vemos los bailes sensuales de Almendra, Jaina y Rubí.

Zoila: ¡Un aplauso a mis bellas bailarinas!

Todo el público empieza a aplaudir. Baldomero se va al camerino donde las dos bellas jovencitas.

Baldomero: ¡Hola preciosas!

Rubí: Okey, esto es muy aburrido y de lo mismo de siempre. ¿Qué quieres? Nos has prometido llevarnos a la casa esa y lo que menos he visto es que nos lleves allí.

Baldomero: Lo que pasa es que tuve mis percances en estos meses.

Almendra: Pero ¿de qué sirve? Si al final te rajas. Ya dinos de ¿cuál de las dos te gusta más?

Baldomero: Bueno, (en sus pensamientos imagina a Almendra), a las dos.

Almendra: Ay sí tú, ¿cómo no?

Baldomero: La verdad, está bien, iremos a la casa de mi cuñado. Nos divertiremos, incluso él también se divertirá con ustedes.

Rubí: ¡Por supuesto! Me parecerá muy guau todo.

Baldomero las tiene contentas con la noticia.

INT. / SALA DE ESTAR / MANSIÓN SAN ROMÁN / NOCHE

Leticia ayuda a Mónica a sentarse…

Leticia: Mónica, no está bien que te amanezca para esperar a tu esposo.

Mónica: Es mi deber, una buena esposa siempre espera a su marido.

Leticia: Parece que es por insegura.

Mónica: Ni creas, me gusta esperarlo y además, no tengo sueño.

Baldomero que viene conduciendo un auto se detiene a la cochera, mientras que abre las puertas y se van bajando Almendra y Rubí, muy bien vestidas y maquilladas muy excesivamente. Pasan a la casa de Julián y Lorenza los atiende…

Lorenza: Permiso para… (Mira a las dos mujeres.) ¡Jesús, María y José!

Baldomero: No digas nada de esto a nadie…

Lorenza se queda mirándolos con mucha preocupación.

INT. / CAFETERIA / CONSTRUCTORA SAN ROMÁN / NOCHE

Julián está sentado en una mesa, Rubén va viniendo al lugar…

Rubén: Que bueno que viniste.

Julián: Me dejaste con la llamada pendiente. ¿Qué sucede?

Rubén: Aunque el doctor le haya hecho los estudios a Mónica, es definitivo, tu esposa sí tiene leucemia, aunque yo me estoy encargando…

Julián: Entonces, ¿crees que hayan sido falsos los estudios que hizo el doctor?

Rubén: Ya veremos, pero por el momento está en incógnita.

Julián: ¡Vamonos de aquí! Quiero estar con mi esposa.

Rubén accede a la petición de Julián.

INT. / PUERTA PRINCIPAL / MANSIÓN SAN ROMÁN / NOCHE

Lorenza se quedaba mirando a los tres. Baldomero rompe el hielo…

Baldomero: Bueno, ya basta, déjanos pasar.

Lorenza: Sí, como ordene usted.

Las dos bellas chicas pasan caminando de forma muy sensual.

Rubí: Y pues, está de lujo todo tus lujos, lastimas que no es tuyo, jejeje.

En tanto, Mónica estaba muy cerca del lugar en la sala de estar, pues ella escucha los ruidos del lugar mencionado…

- Mónica: ¿Escuchas eso? Suenan como a mujeres.

- Leticia: ¿Será posible?

Baldomero sujeta de las cinturas a las dos chicas…

Baldomero: ¿Qué les parece si las dos me acompañan al cuarto?

Rubí: De acuerdo, pero conste, cobramos mucho.

El auto de Julián es conducido por Rubén, mientras que Julián se encuentra en delirio.

Julián (Pasivo): Ah, supongo que tengo que esperar a los estudios que harás.

Rubén (conduciendo): Sí… Pero, de todas maneras, tienes que ser fuerte ante la noticia.

Julián: Eso me preocupa, que sea verdad la enfermedad.

Rubén: Por eso te digo… Tienes que ser fuerte y también cuando se lo cuentes a Mónica.

Llegan al portón y les abre, estaciona el coche. Luego los dos pasan a la casa.

Almendra: Ay bueno, no es para tanto.

Mónica los sorprende a los tres.

Mónica: ¡¿Quién eres tú?! (A Almendra.)

Almendra la ve muy seria.

Mónica: ¡Responde, ¿quién eres tú?!

Almendra: Bueno, yo… A mí me invito Baldo-do-do-mero.

Mónica: ¿Mi hermano te invito? ¡Baldomero!

Baldomero se va hacia ella.

Baldomero (sorprendido): ¿Mónica?

Almendra se siente nerviosa y se va a la puerta. Casualmente Julián se topa con ella después de mucho tiempo, ambos se miran fijamente sin césar. Mónica se da cuenta de ello y los mira con mucho recelo. Baldomero se tranquiliza un poco y Rubí se ve muy distraída.

CONTINUARÁ…