Capítulo 5:
“La Pesadilla”
INT. / LIVING / MANSIÓN
SAN ROMÁN / NOCHE
Raúl (serio): ¡¿Qué
significa todo esto?!
Los tres presentes se
impactan al ver al enigmático don Raúl, pero se sorprende más Baldomero, quien
se ve envuelto en este problema. Don Raúl baja de las escaleras y se presenta
hacia ellos.
Baldomero
(sorprendido): ¡Do-do-don Raúl! Qué bueno verlo por aquí.
Raúl: Te pregunté
¿qué es esto? Encima que eres un vago de porquería, me traes mujerzuelas a mi
casa, como si tuvieras todo el derecho…
Rubí: ¡Óigame, no!
Claro que no, somos damas de compañía.
Baldomero: Silencio…
Raúl: Esto ya es el
colmo. ¡Te me vas largando de mi casa!
Almendra: Ays, no se
haga tan mala onda don ruco, perdónelo ya…
Raúl: ¡Tú no te
metas! Ahora resulta que te defienden estas largartonas, agradece que te
admiren muchacho, porque te largaras con esas…
Almendra: ¿Sabe qué?
(Le avienta una bofetada.)
Raúl (furioso):
¡¿Quién te has creído que eres?!
Almendra: ¡YO SOY…
ALMENDRA!
En el cuarto de
Mónica y Julián, la primera abre los ojos tras escuchar el ruido…
Mónica: Mi amor,
¿creo que hay alboroto abajo?
Julián: Mmm… Voy ya…
Mónica se queda
dormida y Julián sale a ver lo qué pasa…
Rubí: Es más, no le
caería mal una aventurita con nosotras, ¿qué me dice ruquito?
Raúl: No estoy para
eso, están en una casa respetable y las mujerzuelas deben estar donde deben
estar, en los suburbios pidiendo dinero para sus servicios…
Almendra: Es usted un
machista…
Baldomero: ¡Basta!
Por Mónica, no volverá a pasar.
Raúl: Deja de
mencionar el nombre de tu hermana en vano, te me vas y punto…
Julián aparece…
Julián: ¿Qué está
pasando aquí?
De repente, Almendra
se fija en el rostro del hombre y ambos se quedan mirándose apreciando su
reencuentro. Mientras tanto, Mónica en su cuarto…
Mónica: ¿Qué estará
pasando? Me preocupa… (Tocan la puerta.) ¡Adelante!
Entra Leticia…
Leticia: Señora
Mónica.
Mónica: ¿Leticia?
Escuchaste lo que ha pasado.
Leticia: Sí,
seguramente el joven Baldomero debe estar detrás de todo esto.
Mónica: Me lo
imaginaba.
Leticia: Hay que
tener cautela.
Mónica: Sí, de hecho Julián fue a ver ¿qué pasa?
Leticia mira con
preocupación a Mónica. Mientras, con
Baldomero y los demás…
Raúl (serio): Qué
bueno que viniste para que seas testigo de echar a este bueno para nada de
Baldomero…
Julián (extrañado):
¿Y eso?
Raúl: ¿Cómo que “y
eso”? Trajo a esas mujerzuelas (señalando) a la casa.
Rubí: ¡Yo me llamó
Rubí! Y aquí mi amiga se llama la
Almendra.
Julián: ¿Almendra?
Almendra: Sí así es,
pero no se esponje, porque nosotras nos vamos para no causar molestías.
Julián se ve serio y
decide hablar…
Julián: Papá, es
mejor que nos vayamos a acostar…
Raúl: Pero ¿hijo?
Julián: Deja a Baldo,
de todos modos mañana ya sabremos ¿qué hacer?
Raúl con puchero de
gruñón se va. Mientras que Julián se acerca a las chicas y van a la puerta
principal para que salgan caminando, Julián de repente recuerda a Almendra…
Julián: Yo te había
visto. ¿No eres la muchacha que chocaste conmigo en la tarde?
Almendra (extrañada):
¡Claro, es usted! (Interrumpe.)
Rubí: Bueno, bueno,
siento interrumpirlos, le quiero agradecer que nos haya defendido…
Almendra: No nos
defendió, simplemente comentó y se fue.
Julián: Así es, de
hecho ustedes ¿a qué vinieron?
Rubí: Baldomero nos
dijo que tenía una propuesta para nosotras.
Julián: ¿Una
propuesta?
Almendra: Así es y yo
no sé ¿para qué?
Julián se queda
pensativo… En tanto, en el cuarto de Mónica. Don Raúl pasa por los pasillos de
las habitaciones, casualmente se encuentra con Leticia cerrando la puerta.
Leticia (extrañada):
¿Señor Raúl?
Raúl: Leticia, no estoy para tus extrañadas, mejor vete a
dormir. (Se va.)
Leticia se toca el
pecho por preocupación.
EXT. / CALLE / CIUDAD
DE MÉXICO / NOCHE
Julián: Ya como las
conozco como (señalando) Almendra y Rubí.
Las chicas ríen ante
el coqueto galán…
Julián: Me presento,
yo soy Julián San Román.
Almendra: Un placer
joven. (Le pasa la mano de saludo.)
Rubí: ¡Uuuuy!
Almendra te estás rifando.
Almendra (sonrojada):
¡Cállate!
Julián: Jejeje… Muy
bien, (saca su billetera y le da billetes) quiero que tomen esto. ¿Serán
suficientes?
Rubí (emocionada):
¡Ay muchas gracias joven! Es usted todo un caballero.
Almendra: No se
hubiese molestado.
Rubí: ¿Cómo crees? Al
contrario, es que no le haga caso a mi amiga, es que anda de amores.
Julián: Sí, eso ya lo
noté. Nos vemos.
Rubí: ¡Nos vemos!
Almendra: Nos vemos.
(Voltea y lo vuelve a ver.)
Las chicas se van y
Julián las contempla verlas.
INT. / LIVING /
MANSIÓN SAN ROMÁN / NOCHE
Baldomero se toca la
cabeza…
Baldomero: Que bien,
una noche que perdí para proponerles algo…
Julián entra y cierra
la puerta.
Julián: Ahora tú me
vas a explicar ¿para qué las trajiste aquí?
Baldomero: Bueno,
quería que tú y yo la pasáramos de revén con estas bellezas.
Julián (alterado):
¡¿Eres estúpido o te haces?!
Baldomero: Bu-bueno
yo solo pensaba en el bienestar…
Julián: ¿Qué
bienestar? No te das cuenta que estoy casado.
Baldomero: Pues por
eso, es que quiero que Mónica tenga una esperanza contigo…
Julián: No te entiendo
nada, eres un incomprensible. No te das cuenta que hubieras echado a perder mi
matrimonio con Mónica.
Baldomero: Pero es
qué…
Julián: Es que nada,
la verdad que eres un inconsciente y por poco mi papá te hecha de la casa.
¡Piénsalo! (Baldomero se queda paralizado ante esta situación.) ¡Buenas noches!
Julián se dirige a su
cuarto, mientras que Baldomero esboza una enorme preocupación.
INT. / LIVING /
MANSIÓN SAN ROMÁN / MAÑANA
Baldomero se avecina
a la sala, de repente Julián aparece en ella, bajando de las escaleras.
Baldomero le saluda…
Baldomero: ¡Buenos
días cuñado!
Julián (le responde
lo más seco posible): Buenos días.
Baldomero: Oe, se
nota que no estás de buen humor.
Julián: ¿Cómo crees?
No viste que casi te echan de aquí. Solo por Mónica tengo consideración
contigo.
Raúl va viniendo…
Raúl: ¡Buenos días
Julián! (Se da cuenta de Baldomero.) Ah, hola Baldomero.
Baldomero se da
cuenta de la inexpresión hacia él. Todos van al comedor.
INT. / COMEDOR /
MANSIÓN URIARTE / MAÑANA
En el comedor de la
mansión, Clotilde le trae una charola a Rogelio hacia su asiento que es la
principal…
Rogelio: Clotilde,
¿sabes dónde está Emilia?
Clotilde: La señora
se fue sin desayunar, dijo que no apetecía nada.
Rogelio se queda
preocupado por su esposa Emilia.
INT. / PATIO /
ORFANATO / TARDE
Emilia está hablando
con el padre Javier, éste estaba hablando con ella y algunas personas querían
hablar con él, pero pedía que lo dejasen…
Emilia: Yo entiendo
muy bien que es sacerdote y que puedo contarle muchas cosas, pero… No puedo.
Javier: ¿Por qué
hija? Dígame ¿a qué se debe esto?
Emilia se queda
preocupada mirando al padre Javier.
INT. / COMEDOR /
MANSIÓN URIARTE / MAÑANA
Don Rogelio mira su
reloj y denota su impresión, puesto que tiene prisa.
Rogelio (dejando de
usar la servilleta): Me voy, se me hace tarde. (Se levanta.) Clotilde, si mi
mujer viene… Hágamelo saber, quiero hablar con ella.
Clotilde: Muy bien
señor.
Rogelio se va.
Clotilde arquea la ceja.
INT. / DORMITORIO /
CASA DE RUBÍ / MAÑANA
Almendra es la
primera en verse despierta y se mira en un espejo lo triste que se ve. Puesto
que ha tenido nuevamente la misma pesadilla que la atormenta…
Almendra (solloza):
¿Por qué? ¿Por qué sigo soñando con este momento?
Rubí se levanta…
RubÍ (preocupada):
Ay, Almendra ¿qué te pasa? Te veo muy triste.
Almendra: Es esa
pesadilla de nuevo, no la deje de recordar…
Rubí: Fue muy
doloroso para ti…
Almendra: Para cualquier mujer, ¡odio al maldito que me lastimo mucho!
Rubí: Te entiendo,
pero ya no sigas amargándote más. Debes estar muy feliz.
(Se comparte escenas:
*Julián sale de su
casa y aborda su coche para irse al consultorio.
).
Almendra: Lo sé, pero
ponte en mi lugar, ¿si hubieras sido tú? ¿Qué sentirías?
(Se comparte escenas:
*Julián sigue
conduciendo y esboza una gran preocupación.
).
Rubí: Sentiría lo
mismo que tú. Pero no es para tanto. Mejor hablemos de cosas bonitas, como lo
que paso en la casa esa del fufurufo del viejo malcriado de la mansión.
Almendra: ¿Qué tiene?
Rubí: ¿cómo que
tiene? No viste al hijo del viejo ese…
Almendra: ¿Julián?
Rubí: Sí, ese mero.
Que no le viste, es muy guapo, sexy y seguro que tiene unos brazos muy
trabajados.
Almendra: Ay, amiga
en ¿qué piensas?
Rubí: Es que digo la
verdad, cualquier mujer se moriría por estar con un príncipe como él. ¿A ti no?
Almendra: Bueno… “Me
gustan esos hombres que se cuidan, trabajen duro y se preocupen por otras
personas…”
(Se comparte escenas:
*Julián llega al
consultorio, baja del coche, cierra con seguro y entra al local.
).
Almendra: Quizás
algún día conozca al hombre ideal.
Rubí: Ay no bueno,
pero que cursi me saliste.
Almendra: Jajaja… Sí
¿verdad?
Almendra demuestra
una enorme felicidad ante su amiga Rubí.
INT. / OFICINA DE
JULIÁN / CONSULTORIO / MAÑANA
Julián ya dentro de
su oficina. Tocan la puerta y…
Julián: ¡Adelante!
(Entra y es Rubén.)
Rubén: ¡¿Cómo te va
con estos loquitos?! (Haciendo piruetas de círculos.)
Julián: Jajaja… Hoy
no han venido, ¿qué te trae por aquí?
Rubén: Bien se trata
de salir a ver unos cuantos clientes del reclusorio. Pues como veras, estos
jóvenes parecen ser el futuro de la delincuencia.
Julián: Por supuesto
que iré. He visto mucha injusticia a inocentes, es hora de mostrar que la
verdad es la última palabra.
Rubén esboza una
sonrisa. Mientras que Julián se le ve decidido.
INT. / SALA DE ESTAR
/ MANSIÓN URIARTE / TARDE
Clotilde: Señora
Emilia, ¡qué bueno verla por aquí!
Emilia: ¿Qué sucede
Clotilde?
Clotilde: El señor
Rogelio me comento de su ausencia y quiere hablar con usted.
Emilia: De acuerdo, pero por el momento, yo he venido para almorzar y salgo para después.
Clotilde: Muy bien.
Emilia: ¡Ah!
Clotilde, dígale a mi esposo, que lo veré en la noche, voy a estar ocupada esta
tarde.
Clotilde: Cómo
ordene.
Emilia esboza una
preocupación.
INT. / OFICINA DE
RAÚL / CONSTRUCTORA SAN ROMÁN / TARDE
Raúl administra sus
papeles, mientras que la secretaria por el altavoz le avisa…
Secretaria: Ingeniero
San Román…
Raúl: See…
Secretaria: Lo busca
el abogado Uriarte.
Raúl: Hágalo lo
pasar.
Rogelio adentra en la
oficina.
Rogelio: ¡Raúl!
Raúl: ¡Rogelio! Qué
bueno que has venido. Justamente quiero ajustar cuentas con una empresa de
negocios.
Rogelio lo mira
prestando atención.
EXT. / CALLE / CIUDAD
DE MÉXICO / TARDE
Emilia recorre las
calles de la ciudad de México, buscando a su hija o encontrarse con la chica
que se encontró el otro día…
Mientras tanto,
Almendra en una calle muy alejada de ella, junto con Rubí, se va a pasear como
una vagabunda hasta que esperen que se haga de noche y retornar en “La
Tongelele”…
Almendra: No sé de
verdad si quiero salir.
Rubí: Yo estaba
aburrida que quise salir a donde sea.
Almendra: Mmm… Bueno
al menos disfrutamos de la ciudad entera.
Rubí: Yo la verdad,
esperaba que esos dos galanes que se nos presentaron, aparezcan aquí.
Almendra: Pero… Ese
sueño es imposible, porque… ¡Mira toda esta ciudad! ¡Es inmensa!
Rubí y Almendra
continúan caminando. En tanto, Emilia continúa su camino por diferentes calles.
Finalmente, por casualidad se encuentra con las bellas muchachas…
Almendra
(sorprendida): ¡Usted!
Emilia esboza una
sonrisa y a la vez siente que las lágrimas se les vienen encima.
Rubí: Ay amiga, esto
me preocupa mucho, mira la señora te mira muy raro.
Almendra: Es porque es la misma que me tope el otro día.
Emilia: ¡Qué gusto
verte de nuevo!
Almendra: Hey, hey,
hey, ya!!! No la conozco y me está confundiendo.
Emilia: Pero es que eres mi…
Almendra (extrañada):
Su ¿qué?
Emilia: Eh, (Emilia
se queda pensativa y en pausada.) Nada, solo que me pareciste familiar.
Emilia se va
corriendo para su coche con conductor y se van. Ellas se quedan extrañadas.
Mientras vemos dentro del coche a Emilia.
Emilia (solloza con
un pañuelo en manos): No puede ser, esa es… Tiene que ser ella.
Conductor: ¿Le sucede
algo señora?
Emilia: ¡No! Nada,
sigue tu camino, por favor, llévame a casa.
Conductor: ¡A la orden!
Emilia esboza una tristeza
profunda. Almendra y Rubí quedan en pausadas en la calle.
Rubí: A mí me
preocupa esto, ¿quién era esa señora?
Almendra: Seguramente
está loca, por poco me dice que soy…
Rubí: ¿Su hija?
Almendra se queda
pensativa ante el comentario de Rubí.
INT. / SALA DE ESTAR
/ MANSIÓN SAN ROMÁN / NOCHE
Mónica está leyendo
una revista, mientras que Leticia le hace compañía. En la puerta llega Julián
con Rubén.
Lorenza: ¡Joven
Rubén!
Rubén: Hola Lore... bueno yo paso a retirarme.
Julián: Muy bien, nos
vemos pronto.
Rubén: Sí, hasta
luego.
Julián pasa a la sala
de estar y se encuentra con su amada esposa.
Mónica: ¡Mi amor! Qué
bueno que viniste, te extrañé mucho. (Le da un beso labial.)
Julián: Yo también
cariño. (Le contesta con otro beso.) ¿Y mi papá?
Leticia: Su padre no
ha venido aún.
Julián se preocupa en
algo a su padre.
INT. / CUARTO DE
HUÉSPEDES / BAR “LA TONGELELE” / NOCHE
Jaina se excita
demasiado, parece disfrutar el masoquismo de un hombre en la cama. Vemos que la
joven y maliciosa mujer se queda agitada y para sorpresa, el dichoso hombre
resulta ser…
Raúl (agitado): Lo
haces muy bien para ser una chamaca.
Jaina: Mi sorpresa es
que usted a tanta edad lo haga como un Dios.
Raúl (molesto): ¡Me
estás diciendo viejo!
Jaina: Ay, claro que
no, ¿cómo cree? Solo que me gustan los hombres como tú. Es un cumplido cariño.
Raúl: Jejeje… Más te
vale chula.
Ambos se miran con
mucha confianza y malicia por el ambiente.
Almendra y Rubí
continúan su baile, mientras que en el público tenemos como siempre a Baldomero
que le chifla a las dos chicas. Termina el show.
Baldomero va hacia
ella detrás de las bambalinas.
Baldomero: ¡Qué hubo
mis monas!
Almendra: ¿Qué
quieres?
Rubí: Sí, ¿qué
quieres farsante? Ya sabemos que esa no era tu casa.
Baldomero: No bueno
yo les quería pedir si fuéramos otra vez a la casa.
Almendra: ¡Claro que
no! Ya ni le quiero entrar a tu juego.
Baldomero: ¿Quizás
otro día?
Rubí: Lo tomaremos en
cuenta.
Pasa la noche y vemos
a los protagonistas en sus camas en sus respectivos hogares. Ambos están
sudando excesivamente y tienen el mismo sueño.
Una chica muy débil
está corriendo alejándose de un hombre que la quiere violar. La chica está muy
asustada y sigue corriendo por su vida. El hombre la persigue a más no poder,
ella mira para que se dé cuenta que no se encuentra el sujeto y se detiene. El
hombre se esconde para que no la sorprenda y cuando todo empieza a perder el
curso… La joven es atacada y cae al suelo y se espanta ante el hombre que la
sujeta… La chica resulta ser Almendra, que tiene su traje completamente sucio y
rasgado.
Almendra: ¡Suéltame,
suéltame maldito!
El hombre empieza a
desabrocharse el cinturón de su pantalón y le rasga las vestiduras a Almendra…
Almendra (espantada):
¡NO ME TOQUES! ¡ASQUEROSO! ¡AUXILIO!
El hombre se acerca a
ella y la cara se demuestra y se trata de Julián que se le ve en uno de sus
peores momentos de herejía.
Almendra:
¡NOOOOOOOOOOOOOOO…!
La pesadilla se acaba
y vemos al protagonista levantarse de su cama impactado.
Julián: ¡No puede
ser! De nuevo está pesadilla.
Los protagonistas no
saben que uno del otro son las personas que suelen ser. Puesto que está
pesadilla fue un compartido de escenas en que se baso toda la historia.
CONTINUARÁ…